Brochettes de salmón con ensalada de trigo burgol
Le van a tener que encontrar la vuelta al pescado porque es un salvador en la cocina, además de una excelente decisión nutricional. Acá les dejo una idea.
Sin importar si son dulceros o no, todos tenemos que tener una receta fácil para regalar y hacer felices a todos nuestros queridos.
Puede dudar de cualquier cosa, pero esto me lo tienen que creer. De todos los años que llevo regalando comida, jamás me pasó que a alguien le diera lo mismo. Never ever. Las personas se sienten halagadas, mimadas, felices y uno se siente increíble. Así es que, si buscan sumar felicidad a su vida, el camino directo es hacer felices a otros.
Las galletitas de jengibre no son muy de nuestra tradición, y tal vez ese es su encanto. Nos resultan originales al paladar, estimulantes y súper simpáticas. ¿Qué cómo es el jengibre? El jengibre es una raíz con mucha agua y su sabor es cítrico, ligeramente picante y combina muy bien con casi cualquier especia.
Harina: Mi nueva obsesión son las harinas de trigo blancas orgánicas, ya sabrán. Estoy fascinada de por fin tener harina blanca para mis pastas y dulces sin ningún proceso químico dañoso. Van a notar que las harinas orgánicas son más oscuras que las industriales y eso es perfecto, así debe ser. En esta receta podrían usar su combinación sin tacc favorita porque lo que buscamos es crocantez y no gomosismo.
Manteca: Si bien la manteca es parte del secreto de esta galletita de jengibre, nada malo pasa si usan ghee o aceite de coco. La textura crocante sí se pierde si usan aceite vegetal.
Jengibre: En estos días es bastante sencillo conseguir jengibre fresco, y siempre es preferible. Pero si tienen en polvo, también funciona.
Otras especias: No les tengan miedo, hacen al sabor final y no van a notarlas de forma individual.
85g manteca
100g azúcar blanco
25g azúcar negro
50g melaza
1 huevo
Pizca de sal marina
1 cdta polvo de hornear
1 cda jengibre
1 cdta nuez moscada
Pizca de pimienta blanca
150g harina 0000
Batir la manteca con los azúcares hasta tener una crema bien untuosa. Es importante batir para romper la estructura de la manteca.
Agregar la melaza y el huevo y volver a batir bien.
Incorporar todos los ingredientes secos y unir con una cuchara de madera hasta tener una masa cremosa y firme.
Tomar porciones con una cuchara de postre y verterlas sobre un plato con azúcar. Rodarla hasta que esté cubierta.
Disponer las galletitas en forma de bolita sobre una placa, dejando suficiente separación porque van a expandirse mucho.
Hornear durante 15 minutos a 175°
Dejar enfriar en la placa antes de retirar y guardar en una cajita hermosa.
Le van a tener que encontrar la vuelta al pescado porque es un salvador en la cocina, además de una excelente decisión nutricional. Acá les dejo una idea.
Le damos sobrevida a las medialunas con este postre bomba: French pudding