Preparar masas leudadas tiene el beneficio extra de enseñarnos sobre la importancia de la espera entre acciones. Amiguismos, no todo en la vida es accionar, a veces sólo podemos sentarnos a observar cómo los procesos se desenvuelven con absoluta perfección por sí mismos.
Perder el miedo a las masas leudadas
Muchas personas evitan, le temen, desconfían, de trabajar masas leudadas. Les garantizo que es más probable que se rompa una tortilla al darla vuelta, que fracasar con una masa con levadura. La levadura es confiable, noble, y con seguir un par de instrucciones simples, el resultado es inevitablemente perfecto.
Lo primero que les recomiendo hacer es leer la receta y asegurarse de entender todos los pasos y de tener todos los ingredientes. El tiempo que le dediquen a tener los ingredientes pesados y en su temperatura correcta, las pasas hidratadas, los moldes a punto, el procedimiento en claro, y todo lo demás, es tiempo bien invertido.
Ingredientes de calidad: lo repito en cada receta, pero es así. Una manteca de baja calidad va a dejar un gusto grasos y esa miga que se pega al paladar, que no se puede tapar con ningún extracto. Un extracto de almendras de calidad no se compara con una esencia que en nada se parece un producto casero, y así con cada cosa.
Lo que tienen que tener en cuenta sobre la levadura es:
* Intentar que nunca esté por debajo de los -18° o por encima de los 40°, es decir, no la congelen ni la disuelvan en líquidos por encima de la temperatura corporal.
* No dejar que esté en contacto prolongado con azúcar o sal.
* Respetar los períodos de leudado y las proporciones de harina para un resultado perfectísimo.
Comentarios varios
La textura y la humedad del pan dulce van a depender en gran parte de la cantidad de manteca que utilicen. Yo les dejo la cantidad que yo usé, pero sepan que dentro del rango que les marco, siempre van a tener un pan dulce rico y esponjoso. Lo mismo pasa con el azúcar, un más menos 20% según lo quieran más dulce o más neutro está genial.
La gracia de hacer el propio pan dulce es que sea exactamente como lo soñamos. Siéntanse libres de usar fruta abrillantada, frutos secos, chocolate, chispas, extractos y esencias de su preferencia, el cielo es el límite. Si se ponen super dedicados, pueden hacer sus propias cáscaras confitadas o praliné... son todas lindas tareas navideñas.
Pan Dulce navideño
700g harina 0000
120g azúcar (pueden moverse entre 100 y 150g según el resultado que busquen)
Pizca de sal
3 cdas leche en polvo
12g levadura seca
3 huevos
c/n Agua
Esencia de pan dulce
Extracto de almendras amargas
Vainilla
Entre 125g 225g manteca pomada
(yo usé 150g)
Frutas abrillantadas, chocolate, lo que gusten.
Preparación
1. Colocar en un bowl todos los ingredientes secos, excepto la levadura y mezclar.
2. Agregar la levadura y mezclar. Hacer un hueco en el centro.
3. En una jarra medidora, colocar los 3 huevos y completar con agua filtrada hasta los 450cc. Añadir las esencias y el extracto. Mezclar ligeramente.
4. Volcar los líquidos en el hueco de la harina y comenzar a integrar con una cuchara de madera hasta que ya no quede harina suelta. Dependiendo de donde vivan, es posible que necesiten unos 20 o 30cc de agua adicionales, sobre todo si preparan esta masa con la batidora. Lo que buscan es una masa muy tierna, pegajosa.
5. Vuelcan la masa sobre la mesada y la amasan hasta que tengan un bollo bastante liso. En ese momento, con paciencia, comienzan a incorporar la manteca de a cucharaditas, esperando a que esté integrada para incorporar la siguiente. esto va a llevar un ratito, tal vez unos 10 minutos.
6. Una vez que el bollo es liso, tierno, suave y muy aromático, lo colocan en el bowl, lo cubren con una bolsa y lo dejan leudar. Pueden dejarlo en la mesada unas dos horas y seguir el proceso, o en heladera, hasta 24 horas.
7. Una vez leudada la masa, separan en bollos del peso acorde con el molde que van a usar.
8. Sin amasar, sólo presionando con los dedos, estiran la masa formando un rectángulo. Si van a incorporar nueces y frutas, lo hacen en este momento, sobre la masa extendida.
9. Enrolla la masa como si fuera un pionono bien ajustado. A continuación forman un bollo bien tirante y lo colocan en el molde.
10. Dejan leudar en la mesada nuevamente hasta duplicar el tamaño.
11. El horneado va a depender del tamaño, pero si dividen esta masa en 3 panes, deberían cocinarlos por unos 30 minutos a 175°. Les recomiendo mucho mucho no pasarlos de cocción porque eso los seca y es lo peor que les puede pasar. Ah re. juiiii.
Espero que se animen y lo preparen en familia. ¡Felicidades!